Los Cabos, BCS. _ Hace 18 años, María Ugarte Luiselli aceptó el reto que le planteó un ciudadano estadounidense: lograr la prohibición del arponeo con compresor de aire, un arte ilegal de pesca, y crear un grupo de ciudadanos que patrullaran la Bahía de La Paz para evitar la pesca ilegal.
Durante el Summit 2024 Ciudades con futuro. Sin miedo a la acción, la hoy Directora Ejecutiva de la Red de Observadores Ciudadanos (ROC) participó en una charla en la que narró esa experiencia y la manera como esta organización ha logrado construir en todos estos años la base de daros de pesca ilegal más detallada del mundo, como lo han reconocido universidades de Canadá y Australia.
“Así empezó esta aventura, en un mundo de hombres, en un mundo de pescadores, de biólogos marinos, de científicos, de ONG’s, todos en contra y dando las peores predicciones de lo que queríamos hacer”, recordó.
“Fuimos a buscar a dos pescadores ilegales, uno de ellos muy famoso porque era habilidoso, y lo convencimos de que trabajara para nosotros en este observatorio ciudadano vigilante. Obviamente tenía que dejar de hacer pesca furtiva y se le ofrecieron ciertas condiciones de trabajo favorables que lo animaron a probar”.
Enseguida contrataron a un biólogo y así se conformó el primer equipo del observatorio ciudadano y contra todo pronóstico pusieron la primera panga en el agua para empezar la vigilancia de la Bahía de La Paz por las noches.
“Nosotros no tenemos ninguna competencia, no podemos estar en el mar ni acercarnos, pero a nadie le gusta hacer cosas cuando lo están viendo. Al principio, simplemente por estar, teníamos un efecto de disuasión”. dijo.
Ugarte Luiselli detalló que en la isla Espíritu Santo tenían un registro de 48 embarcaciones realizando pesca ilegal, pero por la presencia de los ciudadanos vigilantes se empezaron a mover a otras zonas y disminuyó la cantidad.
“Ya nos temían, pero eso no era el mejor logro. Los mismos pescadores se empezaron a acercar a denunciar a través nuestra”, dijo.
Durante la charla, la Directora Ejecutiva de ROC mostró un video de un operativo de vigilancia en el que participaron un oficial de Profepa y cuatro elementos de la Secretaría de Marina. El capitán de la lancha en el video es José Luis, aquel pescador furtivo ahora convertido en vigilante ciudadano.
“Eso es haber logrado algo que nos enorgullece muchísimo. Sí se puede, el chiste es tener un plan y podemos hacerlo”, sostuvo.
Recolección y sistematización de datos es clave
Una vez que tuvieron el respaldo de las autoridades en los recorridos, el trabajo de ROC fue más enfocado y con más inteligencia, gracias a los datos que han logrado recabar y sistematizar. Eso les permite planear operativos con precisión y se los presentan a la autoridad cuando tienen un nivel de certeza en el que creen que lograrán un resultado positivo, indicó.
“Hemos, a lo largo de estos 15 años, ido y venido 6 veces a la Luna en recorridos en la Bahía de La Paz, hasta un poco más arriba de San José y hasta abajo de Punta Arenas. En la mayoría de los casos estamos de noche, que es cuando pasa la pesca ilegal más fuerte”, manifestó.
Ugarte Luiselli subrayó que las estimaciones son de que entre el 25 y el 30% de la pesca del mundo no se reporta, pero no hay datos de la pesca furtiva que lo prueben.
Sin embargo, dijo orgullosa que instituciones como Simon Fraser University, de Canadá, y la James Cook University, de Australia, han reconocido que ROC ha logrado construir la base de datos de pesca ilegal que tiene mayor detalle.
“Hoy en la Bahía de La Paz y donde estamos sabemos qué, cómo, cuándo, con qué tipo de Luna, en qué época del año, en qué mes pasan qué cosas. Y con eso es con lo que podemos hacer los operativos más exitosos, porque ya no hacemos aquella vigilancia tipo espantapájaros de velador y que nada más tomábamos datos. Hoy ya vamos a lo seguro, pero también nos hemos dado cuenta que sin datos no hay manera de ser tan específicos o tener tanto éxito en algo”, recalcó.
Comentó que ROC ya ha capacitado a otros campos pesqueros e incluso otras regiones del país para que hagan vigilancia ciudadana con un modelo igual, sistematizado y con la colecta de los datos para que luego puedan ser medidos y comparados.
“Y ese es el objetivo de ROC, poder replicar estas células de ciudadanos vigilantes a lo largo y ancho del Golfo de California. Tenemos un mar que es el único del planeta que le pertenece a un solo país y en este foro están los cinco estados que convergen en el Golfo de California”, expresó.
“Tenemos un modelo probado y la posibilidad de armar un traje a la medida, dependiendo de lo que a ustedes les preocupe que ponga en riesgo el patrimonio natural de esta zona del país, ya sea en tierra, ya sea en mar”.
Ugarte Luiselli manifestó que los ciudadanos de la región son clave como agentes de cambio y pueden hacerlo porque tienen legitimidad, incumbencia y permanencia.
“Es nuestra zona, es nuestro mundo, somos custodios del patrimonio natural de esta región. Nosotros podemos, es solamente querer hacerlo”, animó.
