La unión hace la fuerza y eso es lo que están haciendo Pronatura Noroeste, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Secretaría de Marina y Global Conservation para la conservación de la Reserva de la Biósfera Islas Marías.
Estas organizaciones de la sociedad civil e instituciones de gobierno establecieron en el mes de junio las alianzas que permitirán dar protección a los ecosistemas presentes en esta Área Natural Protegida (ANP) que está ubicada a 120 kilómetros de San Blas, Nayarit, y a 170 kilómetros de Mazatlán, Sinaloa.
Pronatura Noroeste destacó que como parte de la visita que hicieron a la Reserva, se concretó la firma del programa de trabajo para el fortalecimiento de las acciones de supervisión, inspección y vigilancia que esta organización y sus socios desarrollan para esta ANP.
“El objetivo es fortalecer la detección y atención a irregularidades pesqueras en la zona, cuya extensión supera las 640 mil hectáreas. Para ello se utilizarán diversas herramientas tecnológicas como los sistemas Marine Monitor (también llamado M2) y Marine Monitor Movil (M3), que ya operan en otros sitios protegidos de la región, como Cabo Pulmo, Baja California Sur”, indica.
Durante la visita que hicieron en el mes de junio a esta Reserva, estuvo presente Alejandro González, director de Global Conservation en México, socio de este importante proyecto de conservación.
Pronatura Noroeste destaca que esta organización, al igual que ellos, cuenta con experiencia en el uso de tecnologías al servicio de la conservación, en distintas sitios alrededor del mundo.
Durante los recorridos, se contó con la participación de personal de la Secretaría de Marina, lo que permitió contar y compartir con información relevante y definir acuerdos encaminados a fortalecer el cumplimiento de la legislación ambiental y pesquera para beneficio de la vida silvestre y los hábitats presentes en las Islas Marías.
La relevancia ecológica de las Islas Marías se debe, en gran medida, al aislamiento geográfico que mantienen desde hace ocho millones de años. Esto la convierte en un refugio de especies endémicas, como el loro de cabeza amarilla (Amazona oratrix), el mapache de las Islas Marías (Procyon lotor insularis) y el conejo de las Islas Marías (Sylvilagus graysoni). También es sitio de anidación para aves marinas y de descanso para diferentes aves migratorias que provienen de Norteamérica.
En el año 2000, el gobierno federal declaró las Islas Marías como Área Natural Protegida (ANP) con carácter de Reserva de la Biosfera y en 2019 se anunció el cierre de la prisión que funcionó en este lugar desde el siglo 20, lo que permitió estructurar de forma integral los planes de protección ambiental a las cuatro islas que conforman el archipiélago: Isla San Juanico, Isla María Magdalena, Isla María Cleofas y la mayor de ellas, Isla María Madre, en la que operó el centro penitenciario.
Fuente: Pronatura Noroeste