Avistan entre Durango y Sinaloa supuesto ejemplar de ave extinta

Avistan entre Durango y Sinaloa supuesto ejemplar de ave extinta.

El 26 de octubre de 2011, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) publicó un boletín que tituló: “Pájaro carpintero imperial, su último vuelo en la naturaleza”, en el que relataba sobre el único material existente en el que se captaron escenas de esta majestuosa ave viviendo en su entorno.

Destaca que en la edición de octubre de 2011, la revista científica The Auk de La Unión de Ornitólogos Americanos, documenta el descubrimiento de una película histórica tomada en 1956 por el ornitólogo aficionado William L. Rhein en los bosques del Cerro Gordo, en el sur de Durango, donde capta imágenes del pájaro carpintero más grande que ha existido en el mundo y que habría quedado extinto desde hace más de cinco décadas.

Sin embargo, Esteban Villegas Villarreal, gobernador de Durango, informó a Newsweek que el pájaro carpintero imperial, endémico de los bosques de pino y encino de la Sierra Madre Occidental, fue avistado en la Reserva de la Biósfera Piaxtla-Tayoltita, una futura área natural protegida que se ubica entre Durango y Sinaloa.

Estos descubrimientos, destacó, resaltan la importancia de preservar y proteger los ecosistemas naturales, ya que revelan la existencia de especies que contribuyen a la biodiversidad regional.

Esta nueva área protegida que se pretende decretar no se contemplado una veda en la zona, sino un manejo adecuado de los recursos naturales de la zona.

Según la información del mandatario de Durango, además del supuesto avistamiento del pájaro carpintero imperial, se logró el redescubrimiento de un tipo de pino que se creía extinto a nivel mundial y la presencia de jaguares en una zona dnde no se conocía de su presencia.

En una colaboración para Grupo Ecológico Sierra Gorda, el fotógrafo de conservación, Roberto Pedraza Ruiz, dijo que, de acuerdo con investigadores, el pico de extinción del pájaro carpintero imperial se dio entre 1946 y 1965.

Las causas de la desaparición de estas aves, que llegaban a medir hasta 50 centímetros, fueron la acelerada extracción maderera que dejó al carpintero sin sus sitios de anidación y alimentación, diezmando las poblaciones rápidamente, además de la cacería con fines de diversión de la que fue víctima por parte de los humanos.

En 1996, la Sección Mexicana del Consejo Internacional para la Preservación de las Aves publicó el Informe final del Proyecto G028 “La situación del carpintero imperial (Campephilus imperialis) y de los bosques de coníferas maduros de la Sierra Madre Occidental, México”, en el que confirmó que esta ave estaba extinta.

Hasta el momento, la Conabio no se ha pronunciado sobre el supuesto avistamiento registrado en Durango.

Fuente: Newsweek en Español

Francisco Cuamea: