De acuerdo el estudio Sustainable Travel Report 2023 de la plataforma digital Booking.com, el 72% de las personas que viajan consideran que deben tomar decisiones de viajes sostenibles para salvar el planeta. El 73% de los viajeros tienen la intención de hospedarse al menos una vez al año en un alojamiento sostenible y el porcentaje crece año tras año, lo que abre una oportunidad a los hoteles que tienen esta misma visión.
Pero ¿qué características debe tener un hotel para considerarse que es sostenible? En su blog de sostenibilidad, BBVA destaca que esto va más allá de criterios puramente medioambientales, ya que también lleva implícitos criterios sociales y culturales. Esos son los tres pilares que la Organización Mundial del Turismo establece para considerar al turismo como sostenible.
Para ser sostenible, un hotel debe optimizar los recursos medioambientales para reducir el impacto en el entorno y disminuir la huella de carbono. Lo puede hacer a través de las siguientes acciones:
Hacer uso de energías renovables
Adoptando estas tecnologías el establecimiento logrará que las emisiones por el consumo eléctrico de luz, climatización o refrigeración durante el desarrollo de la actividad hotelera sean cero contaminantes, ya que este tipo de tecnología no emiten gases nocivos para el planeta.
Hacer uso de iluminación LED
Gracias a este tipo de iluminación, el consumo puede verse reducido hasta en un 80%.
Establecer sistemas de aprovechamiento de agua
Como pueden ser sistemas de purificación del agua que permitan su reutilización para, por ejemplo, los sistemas de riego del hotel; o la instalación de grifería y sanitarios automatizados que permiten reducir hasta en un 50% el desperdicio de agua en comparación con la grifería manual. En este ámbito, también se trabaja en la concienciación mediante la incorporación de mensajes dirigidos a los huéspedes para reducir el cambio de toallas teniendo en cuenta el consumo de agua que esto conlleva.
Reducir residuos a través del reciclaje o la reutilización
En muchas ocasiones los residuos orgánicos procedentes de la comida se trasladan a espacios donde se realiza abono para los espacios ajardinados del alojamiento.
Utilizar materiales reciclados o productos biodegradables
Muchos hoteles ya optan por colocar en los baños de las habitaciones amenities ecológicos o dispensadores para evitar la monodosis y disminuir el número de residuos que se generan a través de estos envases. También utilizan detergentes o productos de limpieza biodegradables para reducir la contaminación de las aguas.
Utilizar materiales y técnicas de construcción sostenibles en las instalaciones
Estos pueden ser reciclados o aquellos que pueden recuperarse o reciclarse y no son nocivos para el medio ambiente. Deben permitir una buena eficiencia energética y garantizar una larga duración
Contribuir a la conservación de la biodiversidad, los ecosistemas y paisajes
Esto supone la conservación del entorno y la protección de las especies de la zona, sobre todo en las áreas protegidas y zonas con alto valor de biodiversidad.
Pero, además, para ser sostenible, un hotel de fomentar el empleo local, la compra de productos de proximidad para contribuir con la economía local y visibilizar a los pequeños comerciantes.
Los alojamientos hoteleros sostenibles dan prioridad a proveedores locales y de comercio justo, apoyan a los emprendedores locales en el desarrollo y venta de productos y servicios sostenibles que provienen del entorno natural, cultural e histórico de la zona.
El fomento del empleo, el consumo de productos de cercanía y el apoyo a lo local es clave para la construcción de una economía circular que, además, supondrá reducir la pobreza.
Un hotel sostenible también respeta la autenticidad sociocultural de las comunidades locales, por lo que conserva los activos culturales y arquitectónicos, y los valores tradicionales, lo que supone el mantenimiento y la integración de áreas patrimoniales protegidas a la hora de diseñar el hotel o realizar modificaciones en el mismo.
Fuente: BBVA