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Empresa, emprendimiento y economía

Economía circular
Nueve casos de economía circular que ayudan a limitar el calentamiento global
El Circularity Gap Report 2023 marca un retroceso en la circularidad, al pasar del 9.1% en 2018 al 7.2%, pero en todo el mundo ya hay ejemplos de que sí se puede reducir la extracción de materiales con la reutilización, reparación y reciclado

Acelerar la transición de la cultura del uso y tiro hacia la economía circular es esencial para evitar la superación de los límites planetarios y limitar el aumento del calentamiento global a 2 °C, destaca Foro Económico Mundial.

Sin embargo, Megan Murdie, escritora y editora de Economía Circular, detalla que el Circularity Gap Report 2023 muestra una tendencia preocupante, ya que la circularidad ha caído del 9.1% en el reporte de 2018 a un escaso 7.2%.

“Esto significa que de los más de 100 mil millones de toneladas de materiales que se extraen del planeta cada año, solo el 7.2% se reutiliza en la economía mundial”, subraya.

El Circularity Gap Report 2023 divide a los países en tres grupos diferentes, tomando en cuenta su contexto y necesidades: construir, crecer y cambiar.

Foro Económico Mundial destaca nueve acciones que se llevan a cabo, tres por cada grupo, las cuales están ayudando a acelerar la transición a la economía circular y que son ejemplo de que sí se puede reducir hasta en un tercio la extracción de materiales mediante la reutilización, reparación y reciclado.

Construir

En este grupo están los países de renta baja que albergan al 46% de la población mundial, pero tienen un bajo consumo de materiales y luchan por satisfacer las necesidades sociales básicas. Los países en vías de desarrollo viven dentro de los límites del planeta, pero aun así necesitan construir un sistema económico que atienda a las necesidades básicas de su población.

  • ColdHubs: refrigeración alimentada por energía solar

La empresa nigeriana ColdHubs, una solución de refrigeración como servicio tras la cosecha que funciona con energía solar, hace que el desperdicio de alimentos sea cosa del pasado y, de paso, reduce las emisiones.

Creados en 2015 por la empresaria Nnaemeka Ikegwuonu, los ColdHubs son unidades de almacenamiento de un metro cuadrado que conservan los alimentos frescos hasta 21 días. En 2020, las 54 unidades de ColdHubs evitaron que se desperdiciaran más de 42 000 toneladas de alimentos, lo que equivale a más de un millón de kilogramos de CO2.

  • Hospital de la Amistad, Banglades

Un hospital de Bangladesh está causando sensación y ha sido calificado como "el mejor edificio nuevo del mundo". Situado en la remota aldea de Shyamnagar, el Hospital de la Amistad se construyó con materiales locales sostenibles y artesanos locales, teniendo muy presente la igualdad de acceso a la atención sanitaria para las poblaciones vulnerables.

Los arquitectos se adaptaron intencionadamente al paisaje fluvial circundante creando un canal que atraviesa las instalaciones del hospital, proporcionando refrigeración natural y separando a los pacientes internos de los externos. Dos depósitos de agua situados a ambos extremos del canal almacenan el agua de lluvia recogida in situ.

  • Taxis electrificados de Katmandú

El aire de la capital de Nepal, Katmandú, está enormemente contaminado por la congestión y falta de mantenimiento de las carreteras, y falta de gestión del transporte. Para combatir este problema, a mediados de los noventa se introdujo en Katmandú el Safa Tempo, un vehículo de transporte público de tres ruedas alimentado por baterías.

En la década de 2000 más de 600 de estos vehículos eléctricos ocupaban las calles urbanas. La fabricación de cargadores, las estaciones de carga de baterías y las operaciones crearon unos 750 puestos de trabajo, mientras que para los conductores se crearon 600 empleos.

Crecer

Aquí se ubican los países de renta media que se están industrializando rápidamente y construyen infraestructura para sacar a sus poblaciones de la pobreza y tienen una clase media creciente, que consume el 51% de los materiales.

  • Movilidad urbana eléctrica de Shenzhen

El transporte por carretera aportó el 86,8% de las emisiones totales de carbono de China en 2019 y el sector del transporte chino en su conjunto contribuyó en un 11% a todas las emisiones mundiales de carbono. En 2017, Shenzhen fue la primera ciudad del mundo en electrificar todos los autobuses para recortar las emisiones, reducir la contaminación acústica y mejorar la calidad del aire. El resultado fue un descenso anual estimado de unos 4,316 millones de toneladas de partículas contaminantes.

  • La start-up tailandesa de un sorprendente superalimento

La producción de alimentos de origen animal -desde huevos y lácteos hasta carne- se ha triplicado en los últimos 50 años, ejerciendo una inmensa presión sobre varios límites planetarios. Global Bugs aporta una solución con la ayuda de una proteína alternativa elaborada a partir de grillos. La producción de polvo de grillo es más rentable y menos intensiva en carbono que la del ganado vacuno, además de tener un mayor valor nutritivo.

Considerados un superalimento, los grillos son una rica fuente de grasas saludables, vitaminas, minerales y proteínas que aumentan el valor nutritivo de alimentos, bebidas, suplementos dietéticos y alimentos para mascotas.

  • La marca brasileña de cosméticos que da la vuelta al guión de la deforestación

Brasil contribuye al 33,12% de toda la deforestación tropical, principalmente debido a la ganadería industrial. Natura quiere cambiar esta situación. La organización produce cosméticos con ingredientes procedentes de la selva amazónica. Sin embargo, Natura cuenta con un modelo de negocio poco tradicional: sigue la filosofía del "bosque en pie", que defiende que un árbol tiene mucho más valor en pie que talado. Esta filosofía ha preservado casi 2 millones de hectáreas de selva tropical y ha canalizado los beneficios de Natura hacia las comunidades locales.

Cambiar

En este grupo están los países de renta más alta que ofrecen un alto nivel de vida, pero consumen el 31% de los materiales del mundo. Estos países tienen mucho camino por recorrer para replantearse su forma de hacer las cosas y la responsabilidad de reducir el uso de materiales y la contaminación, y asumir la responsabilidad de sus propios residuos.

  • Cubos tecnológicos para residuos alimentarios en Corea del Sur

La acumulación de residuos en las calles surcoreanas provocó protestas públicas y en 2005 se prohibió el vertido de alimentos. Hoy, Seúl planea utilizar los residuos alimentarios para iniciativas de agricultura urbana. La ciudad ha instalado 6000 contenedores con instrumentos como básculas y tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID) para pesar los residuos alimentarios a medida que se depositan y cobrar a los residentes de acuerdo a su uso.

Los responsables municipales afirman que las máquinas RFID han contribuido a reducir el vertido de alimentos en Seúl en casi 47 000 toneladas en seis años.

  • Cómo Holanda se convirtió en la capital mundial de la bicicleta

En los años setenta se produjeron en los Países Bajos protestas masivas contra el aumento de las muertes por accidentes de tráfico y la demolición de zonas históricas para construir autopistas. La crisis energética creó una tormenta perfecta que llevó al Gobierno a dar prioridad a la movilidad segura y limpia. Con la construcción de 20 000 kilómetros de ciclovías, el uso de bicicletas se convirtió en la nueva norma. Ahora, más de una cuarta parte de los desplazamientos en los Países Bajos se hacen en bicicleta, y con 17 millones de habitantes, el país alberga 23 millones de bicicletas.

  • El Índice de Reparabilidad de Francia para alargar la vida útil de los productos

En un esfuerzo concertado por combatir la obsolescencia programada, Francia ha sido el primer país europeo en introducir un índice de reparación para productos como teléfonos inteligentes, televisores, ordenadores portátiles y cortacéspedes. El índice, que debe mostrarse cerca de los productos en las tiendas y en Internet, abarcará con el tiempo más artículos y también calificará la durabilidad. Siguiendo los pasos de Francia están la Ley de Derecho a Reparación de Estados Unidos y la Iniciativa de Productos Sostenibles de la Unión Europea.

Fuente: Foro Económico Mundial

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